jueves, noviembre 22, 2007

Dos, tes, cuato...

La pequeña Hurona aún parece hablar algún lenguaje sumerio que aprendió en las recónditas profundidades de mamá Hurón antes de nacer. Sin embargo, tal como alguna vez lo comenté con el Sr. Oportuno, la muchacha ha empezado de repente, sin previo aviso, a hablar con bastante claridad.

Entre sus frases favoritas están: "Queyu" en lugar de "Quiero", "Eche, mami", "¡Guau! ¿Qué es esto?", "¡Bravuu!", "De aquí sí se ve", "¡Bye!" y recientemente "¡Adiooos!".

Sin embargo, lo que nos deja bastante sorprendidos es el hecho de que la señorita cuenta. Así es, mi abuelo lleva semanas tratando de enseñarle a contar con un viejo ábaco de madera que yo solía tener de adorno en mi cuarto de soltera. El resultado es que la Hurona cuenta, específicamente, del dos al cuatro. Cada vez que intentamos convencerla de que cuente desde uno y hasta cinco, ella responde con "dos, tes, cuato".

Me recuerda a la Santa granada de mano de Monty Pyton y Los caballeros de la mesa cuadrada.

2 comentarios:

Diana dijo...

¡Oye, qué bien que la Irene ya habla!

Comienza la época larga y chida de estar escuchando las mamadas que se le van a ocurrir... pensándolo bien, esa época nunca termina para muchos de nosotros, comenzando por mí.

Muy bien por la Irene, espero que pronto ande comadreando chido con la Helenis.

¡Saludos, Yas!

Nahum dijo...

Debo prestarte el libro de... bueno, no recuerdo cómo se llama, pero está chido. Cuenta cómo van adquiriendo las nociones de lectura y escritura los güercos. Seguro te será harto divertido.